Aula de contenidos digitales.
Hoy nuestra paciencia está siendo puesta a prueba por nuestro peor enemigo en la facultad: el Adobe Premiere Pro. Ya nos tenía declarada la guerra desde hacía meses cuando se negó por primera vez a soportar el peso y la calidad de los vídeos que habíamos grabado pero lo de hoy es pura crueldad. Tras una hora y pico de edición esta mañana (por no hablar de las semanas que llevamos editando) para finiquitar los retoques de estilo y color de nuestro videoclip, nos dispusimos a empezar la ardua tarea de exportar el vídeo. Premiere Pro se encargó de "alegrarnos" la mañana con un "1 hora y 50 minutos restante" que nos ha mantenido por turnos pendiente del maldito ordenador. Una vez terminada la infumable espera, el grupo de reúne cruzando los dedos por no hallar ningún error en la exportación ¡PERO OBVIAMENTE ERA MUCHO PEDIR, DICHOSO PREMIERE! Y así topamos con dos errores de imagen en el inicio y uno de sincronización. Abrimos el proyecto, intentamos encontrar el origen del fallo (ni rastro) y sincronizamos lo que faltaba. Hacemos una exportación de un fragmento y esta vez el error aparece en otro momento (TOMADURA DE PELO) Total, que aquí seguimos, desde las 10 de la mañana sin haber abandonado este aula ni para comer. Esperando que el dichoso videoclip se exporte desde dos ordenadores distintos a ver si el error desaparece o Premiere nos deslumbra con algo aún más absurdo que todo lo anterior.
Firmado una que está muy harta.
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